Ignasi de Solà-Morales

Nacido en Barcelona en 1942 en el seno de una familia de arquitectos, Ignasi de Solà-Morales se licenció en Filosofía y se doctoró en Arquitectura, disciplinas que confluyeron en una trayectoria donde la teoría y la práctica caminaron siempre de la mano. Fundó su propio despacho en 1971, desde donde impulsó una arquitectura sensible al contexto, con una mirada crítica y cultural.

Especialista en rehabilitación, fue responsable de obras emblemáticas como la reconstrucción del Gran Teatre del Liceu tras el incendio de 1994 y la reedificación del Pabellón Mies van der Rohe. Firmó también proyectos urbanos en Marsella, Tarragona y Barcelona, y edificios que van de teatros a viviendas o equipamientos deportivos.

Su inquietud intelectual se reflejó en una intensa labor teórica y docente, que lo llevó a acuñar conceptos como el célebre “terrain vague”, con el que describió esos espacios urbanos abandonados o indefinidos que, precisamente por su estado de suspensión, abren nuevas posibilidades para la ciudad. Además de sus lecciones como profesor en universidades de todo el mundo, parte de su legado incluye la lámpara Liceo, diseñada para el vestíbulo del teatro homónimo.